Los investigadores estudiaron la salud mental de los participantes en el estudio al cabo de tres años de su inicio tras preguntarles si consumían cannabis o derivados o no.
Felizmente, no se ha descubierto ningún vínculo entre el uso de cannabis y problemas psíquicos posteriores como la ansiedad o la depresión. Incluso el estudio permite sostener que a algunos de ellos los derivados del cáñamo les ayudaron a resistir o combatir esos trastornos.
Por otro lado, el estudio comprobó que los consumidores resultanmás propensos a incurrir en adicciones: a las drogas, al tabaco o al alcohol. La incidencia de consumo abusivo de alguna de estas sustancias es considerablemente mayor en aquellos que eran usuarios de la marihuana que en el resto de participantes en la muestra: es tres veces mayor en relación al alcoholismo y dos veces más respecto al tabaquismo.
En cambio, el experto independiente y doctor en psicofarmacología del centro universitario King's College londinense Amir Englung cree que "un estudio como este no puede determinar la causalidad entre el uso de cannabis y una posterior adicción a las drogas", recoge 'The Telegraph'. Con todo, los autores de la investigación sugieren que los psicólogos y los políticos han de tomar nota de la relación entre el cannabis y las adicciones.
RT