El especialista detalló que se trata de una alteración caracterizada por la aparición de caspa y costras en el cuero cabelludo, así como enrojecimiento en la piel que puede expenderse a distintas partes de la cara, especialmente nariz y cejas.
En el caso de niños que presentan dermatitis seborreica, en ellos aparece la llamada “costra de leche”, y por la excesiva producción de sebo, pueden despedir un olor desagradable.

Según el médico del IMSS, otros factores que pueden agraviar los cuadros de dermatitis, son el estrés, el consumo de alcohol, y enfermedades como el mal de Parkinson, ya que es común que pacientes que son sometidos a tratamiento para control de crisis convulsiva presenten seborrea.

El tratamiento consiste en la aplicación de champús especiales para estos casos que contienen zinc, ácido salicílico y alquitrán. En la piel, se procede a la aplicación tópica de cremas y lociones, y en casos graves se pueden suministrar fármacos anti hongos e inhibidores de calcineurina.

En todos los casos la dermatitis seborreica, requiere la atención médica de un especialista en dermatología, ya que al automedicarse, el paciente corre riesgo debido a que algunos fármacos contienen corticoides contraindicados totalmente para el tratamiento de esta alteración.