Si observamos qué efectos tiene sobre las personas, fácilmente podemos deducir que sobre la madera va a producir efectos drásticos que van a alterar su morfología. ¿Por qué crees que los fabricantes añaden bolsas de sílice dentro de las cajas de las guitarras? La pregunta se responde fácilmente si continúas leyendo.

Así pues, la humedad es uno de los principales causantes de daños en los instrumentos de madera. Aunque no lo creas, tu guitarra aún piensa que es un árbol, y al igual que los árboles, las guitarras se aclimatan a cualquier ambiente al que estén expuestas. Todas las guitarras se ven afectadas por los cambios de temperatura y humedad, especialmente los modelos de alta gama, básicamente porque están fabricadas de piezas de madera encoladas o atornilladas, porque la madera se expande y se contrae. Aquí sufren más las guitarras sólidas que las laminadas.

Las guitarras laminadas resisten mejor los cambios climáticos, si planeas viajar mucho, quizá sea una opción a considerar. Por lo general las guitarras acústicas laminadas son las más económicas, son guitarras de entrada, pero si ya incorporan tapa maciza tendrás que seguir las mismas recomendaciones que para las guitarras acústicas todas sólidas.

Si la humedad ambiente está fuera de las condiciones óptimas puedes esperar el desastre. Del mismo modo, los cambios bruscos de temperatura pueden ocasionar graves daños a las guitarras.

Humedad y temperatura.

En México disfrutamos de un clima maravilloso pero según zonas puede ser muy cambiante, con climas secos y con drásticos cambios de temperatura en el interior, lluvias y humedad, así como zonas costeras con altas concentraciones de humedad.

Las tapas, fondo y los aros de las guitarras acústicas y algunas guitarras semihollow son las más susceptibles a los cambios de temperatura, pero prácticamente cualquier guitarra puede sufrir daños si está fuera de la zona de seguridad por un tiempo prologando. Para proteger tu guitarra se recomienda un nivel de entre un 40%-60% constante, siendo la humedad óptima de entre el 45-55%. Cualquiera de las condiciones fuera de este rango pone en riesgo la estabilidad de las maderas de tu guitarra acústica.

Pero, ¿cómo medimos la humedad que tenemos en nuestro entorno?

La mejor forma de hacerlo es contando con un higrómetro, que es un dispositivo que mide la humedad en el aire. Contar con uno en el estuche y mirarlo periódicamente te dirá si tu guitarra está seca o húmeda.

Es vital contar también con un sistema de humidificación para regular la humedad. Es importante controlar la humedad en el estuche, pero donde realmente tienes que hacerlo es en las dependencias donde vayas a estar tiempo con tu guitarra. De nada sirve que la humedad en tu estuche sea del 50% si en tu habitación hay un 70% de humedad.

La mayoría de sistemas de aire acondicionado disponen de funciones de circulación de aire cálido y seco. Desafortunadamente esto también provoca que las guitarras se deshidraten. Asegúrate de que durante el invierno tienes cerca un sistema humidificador para prevenir los daños en tu guitarra.

Si vives en una zona donde tienes exceso de humedad, necesitarás un deshumidificador. Como decimos muchos sistemas de aire acondicionado ya incorporan esta función, junto con un higrómetro podrás controlar la humedad con precisión, pero también es posible que necesites un dispositivo específico que tenga capacidad suficiente para extraer la humedad. Podrás encontrar deshumidificadores con mayor o menor potencia en función de la zona a deshumectar.

Por otra parte, la temperatura ideal de almacenamiento de la guitarra estaría comprendida entre los 20 y 25º. Las guitarras deben adaptarse al ambiente que las rodea, esta es la razón por la que muchos técnicos de guitarras o roadies dejan las guitarras fuera del estuche en racks antes de los conciertos, ayuda a la estabilidad de la afinación y mantiene las guitarras seguras.

Si eres músico en carretera o bien viajas mucho con tu guitarra, normalmente llevarás la guitarra en un estuche. Podemos atravesar zonas donde haya habido una gran exposición de sol y calor, donde el estuche se convierte en un amigo indispensable. Por esta razón puede ser buena idea cuando sacas el estuche dejar que éste también se aclimate al nuevo ambiente antes de sacar la guitarra. Hay que dejar tiempo a que las temperaturas se igualen para minimizar riesgos.

Los peligros de un almacenamiento inadecuado.

A todos nos gusta presumir de nuestras guitarras y mostrarlas en exposición, pero el lugar más apropiado para conservar la guitarra es en el estuche, a menos que dispongas de una habitación donde puedas tener un control de la humedad dentro de los niveles del 40-60%, donde sí que podrás exponer tu colección. Lo cierto es que como mejor envejecen las guitarras acústicas en cuanto a la curación de la madera es fuera del estuche, no hay nada malo en tener la guitarra colgada en la pared o en el soporte de suelo mientras tengas a raya la humedad. Si no eres capaz de evitar el riesgo al aire seco, o al calor directo de radiadores, fuentes de calor o aire caliente, entonces mejor guarda la guitarra en el estuche.

Además, el estuche al estar fabricado en madera (en la mayoría de los casos) sirve de barrera de protección: la madera del estuche será la primera en absorber la humedad antes que tu guitarra.

Síntomas de una guitarra seca.

Aquí te dejamos algunos de los problemas que puedes encontrar en una guitarra con muy baja humedad:

•    Trastes afilados al final.
•    Acción más baja de lo normal, volviéndose intocable.
•    El tono cambia volviéndose más fino.
•    Inmersión o hundimiento de la tapa alrededor del puente y fondo
•    Grietas en el puente
•    Grietas en la tapa, fondo y aros
•    Acabado con apariencia ondulada

Síntomas de una guitarra húmeda:

Por su parte una guitarra con exceso de humedad presenta unos problemas característicos:

•    Tono sordo, embotado, la calidad del sonido disminuye por absorción de vapor de agua.
•    Sube la acción (altura de cuerdas)
•    Oxidación del hardware (trastes, clavijeros, etc.)
•    La tapa se hincha y el puente puede desplazarse
•    Fondo arqueado.
•    Las partes encoladas se aflojan y/o despegan (braceado, juntas de unión)
•    Puente desencolado
•    Aparición de moho y hongos.

Consejos de almacenamiento para tus guitarras:

Teniendo en cuenta todo lo que te hemos contado, te vamos a dejar algunos consejos útiles para mantener tu guitarra segura:

•    Asegúrate de guardar la guitarra en el estuche cuando no la uses, con un mínimo flujo de aire.
•    Puedes dejar la guitarra en un soporte siempre y cuando tengas un control de la humedad y la temperatura estable dentro de los umbrales de seguridad que hemos indicado (20-25º de temperatura, 40-60% de humedad)
•    Si la habitación donde vas a tocar la guitarra está húmeda, hace mucho calor/frio o está seca, usa humidificadores, aire acondicionado o deshumidificadores para combatir los efectos.
•    Mantén las guitarras alejadas de ventanas abiertas y exposición directa de aires acondicionados o radiadores/calentadores.
•    Nunca guardes las guitarras en habitaciones donde las temperaturas no están reguladas, como áticos, trasteros, etc.
•    Nunca dejes las guitarras en el maletero del coche ya que pueden sobreexponerse al calor del sol en verano o bien sufrir los efectos del frío en invierno.
•    Mantén las guitarras fuera de la exposición directa al sol ya que puede blanquear el acabado o incluso provocar grietas.
•    Si hay mucha humedad en el ambiente, utiliza bolsas de sílice en el estuche para ayudar a absorber la humedad. Asegúrate de reemplazarlas periódicamente.