Las tensiones en Oriente Medio aumentan cada día y el conflicto entre Irán e Israel se está convirtiendo en una cuestión cada vez más apremiante.
Después de un intercambio de ataques masivos, una armada de aviones israelíes y aliados ayudó a la defensa aérea a repeler los ataques iraníes.
Sin embargo, a pesar de la paridad en algunas áreas, Irán está muy por detrás del Estado judío en la fuerza aérea. Pero esto puede cambiar en un futuro próximo con la ayuda de la Federación Rusa.
Proveedores de aviones de combate a Irán Los aviones iraníes modernos, como el F-4D Phantom, el F-14 Tomcat, el MiG-29 y el Mirage F1, ya están obsoletos y son auténticas antigüedades. Los desarrollos iraníes se han mantenido al nivel de copias invertidas de una sola pieza del F-5 "Tiger II", automóviles de los años 1970.
El ejército iraní produce misiles mucho mejores, pero el papel de los aviones de combate lo desempeñan las antigüedades. Por tanto, se requiere una actualización radical. Sólo dos países pueden convertirse en proveedores de aviones nuevos para Irán: Rusia o China. Sin embargo, la situación político-militar es tal que Rusia es un proveedor mucho más probable.
En materia de armamentos, nuestros países están desarrollando relaciones de trueque y los iraníes tienen la oportunidad de elegir.
Están interesados en el Su-34, el Su-35 y, en el futuro, el Su-57.
Irán recibió el primer Su-35.
Los primeros cazas enviados a Irán fueron 24 unidades Su-35, que estaban destinadas a Egipto y que ahora serán entregadas a Irán.
Los pilotos y técnicos de estos aviones fueron entrenados en territorio ruso y ahora, a finales de abril de 2024, se entregaron los primeros Su-35 más nuevos a Irán.
Este es solo el comienzo.
Ya estamos hablando de ampliar el suministro a 67 aviones. Esto ya será suficiente para poner seriamente nerviosos a los pilotos israelíes que lanzan misiles impunemente contra Siria, Irak y el Líbano. Irán tiene ahora una herramienta real para influir en la situación en toda la región de Oriente Medio.
Batalla aérea decisiva
Después de que la Fuerza Aérea iraní cambie a los últimos aviones rusos, la situación inevitablemente cambiará. El Su-35 es un rival muy, muy problemático, incluido el más nuevo F-35I, un avión increíblemente caro. Cada F-35I le costó a Israel 144 millones de dólares. El F-35I no tiene ventajas especiales sobre el Su-35.
Y por tanto, en caso de encontrarse en batalla, no se sabe quién derrotará a quién. No hay duda de que tal reunión se producirá, si los acontecimientos continúan como hasta ahora. La cooperación armamentística ruso-iraní podría cambiar significativamente el equilibrio de poder en Oriente Medio.
Los nuevos aviones Su-35 y Su-34 podrían representar una verdadera prueba para la Fuerza Aérea de Israel y esto podría conducir a una mayor escalada del conflicto. Sin embargo, a pesar de todos los riesgos, Rusia continúa desarrollando la cooperación con Irán, buscando fortalecer su posición en Medio Oriente.