En un artículo de la revista Science, afirman que el análisis de radiocarbono indica que fragmentos de un gran tazón encontrado en una cueva en la provincia de Jiangxi, en el sur de China, podría tener 20.000 años.
Esto es por lo menos 2.000 años más viejo que muestras descubiertas previamente.
Los arqueólogos creen que el tazón pertenecía a una comunidad de cazadores y recolectores que lo usaron para cocinar.