Otros cuatro misteriosos y gigantescos cráteres han aparecido en la región siberiana del norte de Rusia, lo que generó temores de que el calentamiento global pueda estar formando gas que erupcione desde el subsuelo.
Los científicos descubrieron que estos nuevos cuatro agujeros, junto con docenas de otros más pequeños, se encuentran en el mismo área que otros tres enormes cráteres que habían sido hallados en 2014 en la Península Yamal. Se cree que los cráteres se formaron por las erupciones de gas metano por el cambio de temperaturas que hacen que el suelo congelado se derrita.
Además se han despertado temores de que la formación de estos cráteres podría volverse más habitual a medida que el promedio de temperatura continúa subiendo, y esto despertó el alerta de que la zona se enfrenta a un posible desastre natural inminente.
Uno de los nuevos cráteres, rodeado de al menos otros 20 pequeños agujeros, está a tan sólo seis kilómetros de una gran planta de producción de gas. Los expertos han pronosticado que podría haber otros 30 gigantescos agujeros a la espera de ser descubiertos.
Sin embargo, los científicos todavía están en gran parte desconcertados por los procesos exactos que causan los cráteres. Uno de ellos es el profesor Vasily Bogoyavlensky, subdirector del Instituto para el Desarrollo del Petróleo y el Gas, que forma parte de la Academia de Ciencias de Rusia, hizo un pedido para que se realice una investigación "urgente" del nuevo fenómeno en medio de temores de seguridad.