Jorge Carlos Vergara Madrigal explotó la noche del jueves pasado, tras concretarse el descalabra ante los Diablos Rojos. Un aficionado lo insultó. El empresario no aguantó. Explotó. Brincó tres palcos y encaró al seguidor rojiblanco. El incidente estuvo cerca de terminar en golpes.
La fotografía del iracundo directivo le dio la vuelta al país. La frustración no quedó ahí. Fuentes allegadas al plantel aseguran que bajó al vestidor para reprender fuertemente a los futbolistas. Ante el maltrato, el técnico dio la cara por ellos e hizo frente al presidente del club.
Los rumores aseguraban que también se encaró con John van't Schip. Que los ánimos se calentaron. Y que, una vez más, los golpes estuvieron cerca de parecer. Sin embargo, el propio técnico rojiblanco negó dicha versión este viernes.
Durante la práctica regenerativa del Rebaño, el holandés, por iniciativa propia, se acercó a los representantes de los distintos medios de comunicación que cubren cotidianamente la actividad del Guadalajara.
Conversó por espacio de algunos minutos y negó la versión de un supuesto enfrentamiento. Dijo desconocer de dónde había surgido el rumor e inclusive bromeó al asegurar que la única pelea de la noche fue la del "Chatón" Jorge Enríquez, quien terminó con un ojo hinchado debido a un golpe que sufrió en el partido ante Toluca.
El dueño guarda silencio
Al menos públicamente, el empresario Jorge Vergara no ha aparecido para hablar del incidente del jueves pasado. Se esperaba una disculpa para la afición rojiblanca, pero hasta el momento no se ha presentado.
Ni en el sitio de internet que tiene el Rebaño, ni a través de un comunicado oficial, el dueño del equipo ha expresado alguna postura oficial, luego de que los ánimos se encendieron a tres palcos de distancia del presidencial.
Una fuente allegada al club consultó al propio Vergara Madrigal para cuestionarle lo sucedido y reveló que el directivo aseguró no haber respondido a insultos, sino que se enojó porque "golpearon a un empleado de seguridad".
Fuente: Cesar Huerta