La FIFA indicó en un comunicado que las federaciones tendrán que emplear esta ayuda inmediata para mitigar las consecuencias negativas de la COVID-19 en el fútbol, es decir, para cumplir las obligaciones económicas u operativas que puedan tener respecto a su personal y a terceros.
“La pandemia ha provocado dificultades sin precedentes para toda la comunidad futbolística y, como órgano rector mundial, la FIFA tiene el deber de apoyar a aquellos que más lo necesiten. Lo primero es prestar apoyo económico de forma inmediata a nuestras federaciones miembro, ya que muchas están teniendo graves problemas en este ámbito”, dijo el presidente de la organización, Gianni Infantino.
La FIFA insistió en que el plan de apoyo económico “es viable gracias a la sólida situación financiera que ha adquirido en los últimos cuatro años” y que actualmente “se está trabajando en las siguientes fases del plan”.