Según fuentes oficiales de la pareja, «ambos están en distintos momentos de sus vidas.

Es una ruptura de mutuo acuerdo y completamente amistosa», ha confirmado la publicista de Affleck a la revista «People».

De Armas acaba de mudarse a Nueva York mientras Ben continua en Los Ángeles, donde comparte la custodia de sus hijos con su ex mujer Jennifer Garner.

Los actores se separaron después de conocerse en Nueva Orleans a principios de 2020 en el rodaje de su próximo thriller «Deep Water». «Ana ha tomado la decisión y Ben ya no está saliendo con ella. Ella rompió porque su relación era complicada.

Ana no quiere vivir en Los Ángeles y Ben obviamente tiene que hacerlo ya que sus hijos viven en esta ciudad».

Su ruptura es mutua y amistosa, hay un profundo respeto entre ambos. Con tres proyectos en su futuro, el actor está completamente dedicado a su bienestar personal y no puede trasladar su residencia a otro lugar. Affleck, de 48 años, y de Armas, de 32, se mostraron muy enamorados durante los meses de la pandemia y juntos visitaron la Cuba natal de De Armas.

En los meses previos a su separación, de Armas había estado viviendo con Affleck y sus hijos; Violet, 14, y Seraphina, 11, y Samuel, de 8 años. La presión ha sido demasiada para la joven actriz que no quiere rechazar su brillante futuro en Hollywood para comenzar una vida doméstica junto a Affleck.

«A Ana le gustaba estar con sus hijos e hizo un gran esfuerzo, pero ahora tiene que concentrarse en su trabajo», explican en «People». Los dos también se mudaron juntos a una residencia en Brentwood después del verano.

De Armas fue vista llevando sus cosas a la residencia de Affleck en Los Ángeles tras vender su propia casa en Venice Beach. «Parecía muy emocionada de vivir con Affleck». Sin embargo el amor no resistió el envite de la convivencia.

María Estévez