El primer asistente de dirección de 'Rust', David Halls, se convirtió este viernes en la primera persona en ser condenada por el homicidio involuntario de la directora de fotografía Halyna Hutchins, fallecida durante el rodaje de la película en Nuevo México (EE.UU.), informa Variety.

Halls, de 63 años, quien se desempeñaba como coordinador de seguridad en el set de rodaje, se presentó de manera virtual en una audiencia de declaración de culpabilidad ante un juez de Santa Fe, donde admitió su responsabilidad.

Así, recibió una sentencia de seis meses de libertad condicional sin supervisión, una fianza de 500 dólares, 24 horas de servicio comunitario y una clase de seguridad con armas de fuego, por el cargo de delito menor de uso negligente de un arma mortal, recoge Reuters.

"Él es la última línea de defensa. Necesitaba verificar y confirmar si las balas en el arma eran en realidad balas ficticias", dijo la fiscal estatal Kari Morrissey durante la audiencia.

"Señor Halls no revisó cada bala del arma para confirmar que fuera una bala ficticia", agregó.

El hombre, un veterano de la industria con más de 80 créditos cinematográficos, fue el único miembro del elenco y del equipo del largometraje que llegó a un acuerdo con la fiscalía.

Hutchins falleció poco después de resultar herida durante el rodaje del filme en un rancho a las afueras de la ciudad de Santa Fe, el 21 de octubre de 2021.

En ese momento, el actor Alec Baldwin sostenía el arma, que recibió de manos de Halls, quien le gritó "¡pistola fría!", lo que en la jerga cinematográfica indica que el arma no está cargada con munición real y era seguro usarla.

Sin embargo, a la pistola, cargada por la armera de Rust, Hannah Gutiérrez-Reid, le quedaba una bala viva. Baldwin y Gutiérrez-Reid están acusados ​​de homicidio involuntario y podrían enfrentar hasta 18 meses de prisión si son declarados culpables.

Las audiencias en su caso comenzarán en mayo, cuando se espera que también Halls testifique.

El actor, que se declaró no culpable del cargo penal de homicidio involuntario, dijo que confiaba en los expertos en armas, Gutiérrez-Reed y Halls, para asegurarse de que el arma de fuego fuera segura de usar.

Por su parte, Gutiérrez-Ree, en sus declaraciones ante los investigadores, señaló que había entregado el arma a Halls antes de abandonar el set debido a las restricciones por el covid.