El festival musical Victorious, celebrado este fin de semana en Portsmouth, Reino Unido, fue escenario de polémica tras la retirada de varias bandas en solidaridad con la agrupación irlandesa The Mary Wallopers, interrumpida el viernes cuando desplegó una bandera palestina y coreó “Palestina libre”.
Varios grupos cancelaron su participación, entre ellos figuraron The Last Dinner Party, Cliffords y The Academic.
Acusan censura y represión de la libertad de expresión La banda Cliffords anunció en Instagram su no participación en un envento en el cual es reprimida la libertad de expresión, y menos aún “en medio del genocidio en Gaza y el anuncio de hambruna”.
Aseguró también no haber sidoinformado de la política de “no levantar banderas” al aceptar participar y agregó un enlace de donación a Palestina en su perfil.
The Academic declaró que su conciencia no le permite actuar en un evento donde esté limitada la expresión política de los artistas.
Ambas agrupaciones expresaron apoyo explícito a The Mary Wallopers, forzada a detener su concierto mientras personal retiraba la bandera y cortaba el sonido, lo cual generó abucheos del público.
Reacción de The Mary Wallopers y disculpas del festival Tras el incidente, The Mary Wallopers acusó al festival de emitir un “comunicado engañoso” y difundió videos demostrativos de la censura.
“Esto es lo hacemos desde hace seis años, y no vamos a parar... Palestina libre cada día”, afirmaron en Instagram. Ante la presión, los organizadores del festival ofrecieron disculpas a la banda irlandesa y prometieron una donación significativa a los esfuerzos de ayuda humanitaria a Palestina.
Solidaridad de artistas y presión pública The Last Dinner Party declaró no respaldar el silenciamiento de sus colegas y reafirmó la necesidad de de usar las plataformas para denunciar la masacre en Gaza e instó a sus seguidores a realizar donaciones en apoyo al pueblo palestino.
El festival Victorious, celebrado desde 2013, reúne hasta 80 mil asistentes diarios durante tres jornadas.
Para la actual ocasión, la controversia convirtió al evento en un escenario de protesta cultural frente a la ofensiva israelí en Gaza, la cual dejó más de 62 mil 600 mártires y 157 mil 673 heridos palestinos, en su mayoría mujeres y niños, según el Ministerio de Salud del enclave.