Los documentos dicen que Bonner, quien fuera presidente sindical de más de 14 mil patrulleros fronterizos, tenía en su computadora personal más de cuatro millones de imágenes y videos pornográficos.

El hallazgo en el sistema de computación de Bonner se desprende de una investigación por la que se le acusa de conspiración de fraude, por lo que enfrenta una potencial sentencia de hasta 240 años de prisión.

Cuando Bonner fue arrestado en su casa de las afueras de San Diego en agosto pasado, la procuradora federal en la región, Laura Duffy, comentó que el ex dirigente laboral cobraba presuntas horas extras de trabajo cuando en realidad permanecía en su casa y descargaba videos pornográficos.

El ex líder sindical enfrenta una docena de cargos federales por usar los fondos de la organización laboral de 14 mil patrulleros fronterizos en asuntos personales, incluidos viajes de lujo, una amante en Chicago y regalos para sus familiares.

Duffy rechazó que Bonner viajara por motivos de trabajo a otras ciudades y aseguró que usaba el dinero del sindicato para viajes personales.

El ex dirigente sindical se declaró inocente y calificó la demanda como “una venganza política”, porque cuando estuvo al frente del sindicato nacional de la patrulla fue “frecuente crítico de políticas de migración tanto de demócratas como de republicanos”.

Bonner aseguró en la corte federal que será exonerado y que puede probar que los gastos que realizó cuando dirigía el sindicato fueron por representación de su trabajo.

El ex dirigente se jubiló hace dos años y se retiró a vivir en un rancho en Campo, California.