Cada mañana, según medios como el Daily Express o China Press, entre las nueve y las nueve y media, las trabajadoras de una empresa china de Tongzhou, en Pekín, tienen que besar a su jefe porque según él, esta especie de regla "ayuda a reforzar la moral de las empleadas y su amistad".
La mayor parte de las empleadas han decidido acatar esta costumbre para mantener su trabajo, pero hubo dos que fueron despedidas por negarse a besar en la boca a su jefe, lo que demostraría que las trabajadoras están forzadas a hacerlo si quieren mantener el empleo. El vídeo ha sido filmado y difundido por las propias trabajadoras de la empresa.