El papa Francisco permaneció atrapado en un elevador del Vaticano este 1 de septiembre provocando que se retrasara para el rezo del Ángelus. El pontífice permaneció 25 minutos encerrado antes de ser rescatado por los bomberos.
"Hubo una caída de voltaje y se detuvo el ascensor", explicó Jorge Mario Bergoglio en la ventana del Palacio Apostólico ante los fieles que le esperaron por 10 minutos en la plaza de San Pedro.
“¡Queridos hermanos y hermanas, buenos días! Antes que nada, tengo que disculparme por el retraso, pero ocurrió un accidente: Me quedé cerrado en el ascensor por 25 minutos”, explicó el Pontífice quien explicó inmediatamente el motivo.
"¡Un aplauso a los bomberos!", exclamó el papa previo al rezo que pronuncia cada domingo.
Posteriormente, el Santo Padre continuó con su habitual predicación sobre el Evangelio dominical, dirigió la oración mariana del Ángelus y luego de los saludos finales, impartió su Bendición Apostólica.
Es tradición que el rezo del Ángelus (y del Regina Coeli durante el tiempo pascual) sea dirigido por el Santo Padre puntualmente a las 12:00 p.m. todos los domingos y en otras fiestas del Vaticano. Por ello, numerosos fieles acuden a la Plaza de San Pedro del Vaticano para rezar junto al Papa, esto no sucede cuando, por excepción, el Pontífice está fuera de Roma por alguna visita apostólica.
Por este motivo, llamó mucho la atención el retraso del comienzo del Ángelus y durante 7 minutos las imágenes televisivas del Vaticano permanecieron en silencio sin ninguna explicación.
La semana pasada, en esta misma tradicional aparición, el papa Francisco expresó su pesar por los incendios que afectan la región amazónica e hizo un llamado a la comunidad global para enfrentar el desastre.