Grupos de manifestantes en la movilización de este sábado en Barcelona han causado destrozos en La Rambla de Barcelona y tirado objetos contra la comisaría de la Guardia Urbana, además de prender fuego a una furgoneta de la policía local cuando aún había agentes en el vehículo, aunque han podido salir.
Los activistas también han tirado al suelo contenedores, vallas y macetas de la calle y han atacado una sucursal bancaria, mientras furgones de Mossos d'Esquadra recorren La Rambla, donde se concentran los disturbios poco antes de las 20.30.
Poco antes han empezado a quemar contenedores en el Portal de Santa Madrona -junto a la avenida Drassanes-, después de pasar por la Rambla del Raval, donde han atacado otra sucursal y un cajero de otra entidad bancaria.
Asimismo, han atacado varias sucursales de La Caixa y saqueado grandes superficies comerciales, como una tienda Decahtlon situada en la calle Canuda -que ya fue vandalizada la pasada semana- o la de Zara, situada en la plaza Cataluña. Si otros establecimientos han resistido es porque la mayoría de comerciantes de paseo de Gracia ya los habían tapiado con planchas de madera en previsión de que volvieran a sufrir robos colectivos.
Los disturbios se han disuelto antes de comenzar el toque de queda en Cataluña, fijado para las 22h. Hasta entonces han vuelto a arder, además, numerosos contenedores en el centro de la capital catalana, que amanecerá de nuevo con destrozos en su mobiliario urbano, pues los manifestantes también han destrozado a su paso macetas, vallas y bancos para formar barricadas.
Por el momento, los Mossos d'Esquadra han detenido a 10 personas en Barcelona por atentado a los agentes y desórdenes públicos. Mientras que la Guardia Urbana ha detenido a tres personas más por el robo con fuerza en un quiosco. Los agentes han requisado piedras, aguarrás, pirotecnia y pintura.
