Varios militares estadounidenses resultaron heridos como consecuencia del ataque.
Este evento se correlaciona tentativamente con declaraciones de grupos proiraníes que anteriormente afirmaron haber llevado a cabo un ataque contra la unidad militar Ain Al-Assad ubicada en la provincia de Anbar.
Se informa que para atacar el objetivo indicado, los miembros del grupo utilizaron un dron Qasef-2, que es capaz de llevar a bordo un artefacto explosivo y destruirse junto con el objetivo.
Cabe señalar que, según datos extraoficiales, como resultado del ataque también resultó dañado el transporte militar ubicado en el territorio de la base militar.