El petrolero británico Marlin Luanda, atacado este viernes por los hutíes, terminó incediado, según comunicó la compañía Trafigura, operadora del buque. "Los equipos contra incendios a bordo se despliegan para suprimir y controlar el fuego", reza el documento.
"Permanecemos en contacto con el buque y vigilamos la situación cuidadosamente. Buques militares en la región están en camino para prestar ayuda", destaca.
Previamente, los hutíes declararon que realizaron el ataque "en reivindicación del pueblo palestino oprimido y en apoyo y solidaridad con nuestros hermanos de la Franja de Gaza, y en el marco de la respuesta a la agresión británico-estadounidense contra nuestro país".
Según el portavoz de las Fuerzas Armadas, general de brigada Yahya Sari, el ataque forma parte del apoyo al oprimido pueblo palestino de la Franja Gaza y de la respuesta a la agresión estadounidense-británica contra el país.
Sari también aseguró la toma de medidas militares necesarias dentro del derecho de Yemen a defender el país y confirmó la continua solidaridad práctica con el pueblo palestino.
Con anterioridad, la Autoridad de Operaciones de Comercio Marítimo de Reino Unido notificó una explosión a unas 60 millas náuticas de la ciudad yemenita de Hodeidah y el lanzamiento de misiles a unas pocas millas de su ubicación.
A su vez, la empresa británica de seguridad marítima Ambrey informó el lanzamiento de misiles en dirección al sureste del estrecho de Bab al-Mandab.
Por su parte, el Comando Central de Estados Unidos estadounidense ratificó en días previos el disparo de un misil balístico antibuque desde Yemen contra el destructor USS Carney en el Golfo de Adén.