Para avanzar el proyecto de ley se necesitaba un mínimo de 60 votos, pero recibió el apoyo de sólo 45 senadores, mientras que 54 se opusieron. La iniciativa propuesta por los republicanos impondría restricciones a las visas y congelaría los activos de los empleados de la CPI involucrados en investigaciones contra ciudadanos estadounidenses y sus aliados.
Sin embargo, los demócratas expresaron preocupación por las posibles consecuencias negativas de tal medida.
El líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer, dijo que si bien se opone al sesgo de la CPI contra Israel, el proyecto de ley está "mal redactado y es profundamente problemático".
Destacó que el documento podría perjudicar a los aliados de Estados Unidos y a las empresas estadounidenses que cooperan con el tribunal. Anteriormente, en noviembre de 2024, la CPI emitió órdenes de arresto contra Netanyahu y Galant acusados de crímenes de guerra relacionados con las acciones del ejército israelí en la Franja de Gaza.
La decisión generó duras críticas por parte de Israel y sus aliados, incluido Estados Unidos.
En respuesta a las acciones de la CPI, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó un proyecto de ley de sanciones el 9 de enero de 2025, que contó con el apoyo de 243 congresistas, incluidos 45 demócratas. Sin embargo, el proyecto de ley enfrentó resistencia en el Senado.
Los demócratas han expresado temores de que su adopción pueda sentar un precedente peligroso y socavar la justicia internacional.
También señalaron el riesgo de deteriorar las relaciones con los aliados y posibles consecuencias negativas para las empresas estadounidenses que interactúan con la CPI.
Los republicanos, a su vez, insistieron en la necesidad de proteger a los ciudadanos estadounidenses y a sus aliados de las acciones “ilegítimas” de la CPI.
El líder de la mayoría republicana en el Senado, John Tew, dijo que los ataques contra "un aliado cercano de Estados Unidos deberían preocuparnos a todos" y enfatizó que si bien la CPI hoy ataca a los israelíes, "fácilmente podría atacar a los estadounidenses".
En el pasado, la administración del presidente Donald Trump ya impuso sanciones a funcionarios de la CPI en 2020 por preocupaciones de que el tribunal pudiera abrir investigaciones sobre funcionarios militares y de inteligencia estadounidenses.
Sin embargo, estas medidas fueron revocadas por la administración de Joe Biden, que buscó mejorar las relaciones con las instituciones internacionales.