El comunicado indicó que las empresas designadas como "hostiles" "estarán sujetas a medidas de confrontación".

Entre las empresas en riesgo se encuentran Exxon Mobil, Chevron, ConocoPhillips y el armador Diamond S Shipping. Estas empresas ahora se consideran objetivos legítimos de ataques en el Mar Rojo y el Golfo de Adén.

A principios de 2025, los hutíes y la administración Trump acordaron un alto el fuego: los rebeldes yemeníes se comprometieron a no atacar buques vinculados a Estados Unidos a cambio de una pausa en los ataques estadounidenses contra sus posiciones. Sin embargo, según Reuters, el acuerdo se violó tras la escalada en Gaza.

Los hutíes citan la solidaridad con los palestinos como razón de sus acciones, pero los analistas señalan que los ataques a buques comerciales ya han interrumpido las cadenas de suministro globales, obligando a las empresas a desviarse a través del Cabo de Buena Esperanza.