"Saquen eso de inmediato", le dijo Francisco a un sacerdote, según informa el diario 'Clarín'. Y su orden se cumplió velozmente y se retiró la estatua que se exhibía junto a una imagen de la Virgen de Luján, patrona de la Argentina.
La imagen de Bergoglio lo mostraba sonriendo, con su atuendo blanco e impartiendo su bendición. Francisco se molestó por la estatua a causa de su oposición al culto a los personalismos, según indicaron medios religiosos citados por el periódico.
El Arzobispado de Buenos Aires tenía previsto inaugurar el pasado 7 de julio un museo en la Catedral Metropolitana con objetos de Bergoglio de su época de sacerdote, obispo y cardenal. Pero la presentación del museo fue suspendida hasta nuevo aviso.