Lucas, que es afroamericano, percibió connotaciones racistas en la respuesta del vendedor.
Después del altercado, Lucas envió una queja electrónica al encargado de la tienda diciendo que le habían causado “un inmerecido trauma psicológico”.
La oferta de hamburguesas gratuitas para solucionar el conflicto insultó a Lucas que optó por poner una demanda millonaria contra la famosa cadena de comida rápida.