Cuando la Policía de Phoenix detiene a una prostituta después de patrullar las calles o encontrar anuncios en internet la lleva a la iglesia Bethany Bible donde los fiscales y los detectives les dan la opción de participar en una terapia especial en lugar de ser encarceladas.
En el «Proyecto Rose», las mujeres asisten a charlas educativas y se integran en grupos de apoyo aunque hay voces críticas que aseguran que no se tiene en cuenta que algunos trabajadores sexuales son adultos que conscientemente escogieron esta forma de ganarse la vida por voluntad propia.
En marcha desde 2011, más de 350 personas han elegido la «opción terapéutica» para librarse de la cárcel gracias a los impuestos que pagan los contribuyentes de Arizona para pagar los gastos del programa así como los 3.000 dólares que recibe la iglesia Bethany Bible cuando la Policía les lleva a las detenidas en las redadas que realizan cada mes.