La comunidad indígena contactada, los asháninkas, viven en plena selva amazónica en los lindes del estado brasileño de Acre (al noroeste del país) y la frontera de Perú, donde, según sospechan los investigadores del Funai, han sido atacados.
Según las especulaciones de los investigadores, estos ataques, cometidos por otros pueblos indígenas o por narcotraficantes que usan esa zona de la frontera para transportar droga entre ambos países, han debilitado notablemente a la tribu y han impulsado a sus miembros a moverse más allá de su espacio tradicional.
En el vídeo puede observarse cómo los miembros del Funai, ayudados por otros indígenas de la región que hablan una variante lingüística muy parecida, entregan plátanos a los integrantes de la tribu asháninka.
Tras ganarse su confianza entregando esa fruta en medio de un río sin fuertes corrientes, los miembros de la tribu aislada acuden junto con los investigadores del Funai a una aldea cercana en la que cogen herramientas de metal con tecnología más avanzada que la que ellos conocen hasta la fecha.
Pese al temor de los investigadores que intentan evitar que lleven objetos hechos con tela porque, según se les escucha decir en el vídeo "tienen enfermedades" que podrían contagiar rápidamente a los indígenas, los ashánincas pasean sin temor y se llevan varias herramientas.
Según se puede ver en el vídeo, los miembros de la tribu aislada sí tienen miedo a ser atacados y actúan con cautela llevando armas como cerbatanas o arcos y flechas y cuando uno de los antropólogos se acerca a ellos mientras se retiran, un asháninca le apunta con el arco para que se retire, lo que obliga al investigador del Funai a parapetarse.
En el contacto, según comentaron miembros del Funai en una rueda de prensa celebrada esta semana, estuvieron presentes siete indios de la tribu, cuatro hombres, dos mujeres jóvenes y un niño.
En opinión del antropólogo del Funai Terri Quino, este contacto es un "momento histórico".
httpv://www.youtube.com/watch?v=Sb7alahD-BE
El indígena y miembro de la comitiva del Funai que tomó parte del contacto, Jaminawá José Correia fue responsable de establecer comunicación con los ashánincas ya que las lenguas de ambos son parte del mismo tronco lingüístico, el pano.
Según comentó en la rueda de prensa, los indios con los que habló relataron que fueron atacados por no indígenas y muchos murieron después de contraer enfermedades que para ellos eran desconocidas como la difteria o la gripe.
Según su relato, estos ataques fueron cometidos "probablemente en el lado peruano" por personas que posteriormente quemaron sus casas
Asimismo, relató que durante sus conversaciones también dedujo que el grupo tiene "una pelea muy fuerte internamente y necesitaban armamento y aliados".