Alrededor de las 8:30 a.m, llegaron varios inspectores acompañados por 20 policías, quienes solicitaron de forma violenta a los artesanos retirarse, de acuerdo a lo que comentó uno de los afectados.
Esto, tras la llegada del director de Inspección y Vigilancia, Salvador Orozco, quien sostiene una reunión en el ayuntamiento tapatío.
Los artesanos permanecen frente a Palacio Municipal con pancartas, pero con la mercancía guardada para evitar decomisos, y no descartan tomar de nuevo las calles, aunque esto hasta el momento no ha resultado.
Los ambulantes trasladarán al ayuntamiento de Guadalajara, el programa de asistencia alimentaria que desarrollan todos los lunes, para entregar mil desayunos a personas que no tienen que comer.
Por Yenzi Velazquez, Milenio