Esta es una de las conclusiones a las que llega un reporte de riesgos realizado por la consultora Etellekt, que hizo su informe a nivel nacional durante 2016 y detectó las formas de operar de los grupos criminales en el robo de hidrocarburo.
Esos tres Municipios, por donde corre el poliducto de PEMEX a Salamanca, son puntos de alerta, en los que se detecta una alta incidencia de tomas clandestinas y, que por su ubicación clave, son usados como zona de venta y distribución, según el análisis.
"Pueden ser zonas de extracción únicamente para venta regional, pueden estar enclavadas en zonas de importancia logística estratégica, como nudos carreteros, puertos, zonas fronterizas o corredores industriales que permiten la movilidad del producto sustraído", se lee en el documento.
Según los reportes de esta consultora, los principales compradores de este producto hurtado son conductores en general, pero también transportistas e incluso empresarios gasolineros.
Las cifras actuales indican que estos tres Municipios siguen entre los cuatro con más tomas clandestinas en el Estado.
MURAL publicó ayer que este saqueo criminal va al alza en Jalisco y que Tlajomulco sigue siendo el mayor punto de perforaciones, con 109, mientras Zapotlanejo ocupa el segundo lugar con 37 y Tala el cuarto con 31; Zapopan ocupa el tercer lugar, con 35.
Se buscó postura de las Comisarías de dichos municipios y sólo en Tlajomulco aseguraron que no han tenido reportes de venta de combustible en su demarcación.
El estudio también detalla que para saber en qué momento perforar y extraer el hidrocarburo, los criminales necesariamente deben conocer en qué momento es enviado el material, por lo que habría una colusión con personal de PEMEX.
Martín Gabriel Barrón Cruz, profesor investigador del Instituto Nacional de Ciencias Penales (Inacipe), señaló que las autoridades y la petrolera deben tener en cuenta para sus investigaciones las zonas de alta incidencia y la paraestatal debe revisar su personal asignado.
"Lo que no hay es una investigación incluso georreferencial, por lo menos lo que yo he visto en todo este problema, entre la extracción del hidrocarburo, los domicilios de quienes extraen el hidrocarburo y dónde se vende", señaló el especialista.
Por los casos revelados por las autoridades y los que se hacen públicos por accidentes, se ha advertido tanto el uso de equipo sofisticado para la ordeña, como herramientas "artesanales", agregó Barrón Cruz.
El investigador del Inacipe consideró que el combustible robado tiene tres usos comunes: la reventa, el abastecimiento de vehículos de delincuentes y su empleo en la fabricación de drogas sintéticas.
Enrique Osorio, Julio Pérez, Mural