“Estamos hablando de un acto de violencia brutal, ni todas las medidas de las que pueda disponer el gobierno en cualquier nivel son suficientes cuando hay la determinación de cometer un acto tan atroz”, señaló el mandatario estatal durante la conferencia presidencial que se realizó este viernes en este punto turístico.

Ante López Obrador, el gobernador aseguró que Luz Raquel contaba con medidas de protección vigentes, pero responsabilizó del crimen a la situación de violencia que se enfrenta en el país.

“Tenemos un ambiente y una circunstancia social que nos obligaría a reflexionar a todos”.

Sentido adiós en Jalisco para Luz Raquel; activistas demandan justicia Organismos civiles, madres de niños con autismo y activistas coincidieron en que por el crimen de Luz Raquel Padilla Gutiérrez merecen castigo no sólo los homicidas directos, sino también las autoridades estatales y municipales de Zapopan, que fueron negligentes y omisas cuando la víctima acudió a pedir ayuda.

“Los responsables también son del gobierno; señalamos principalmente al gobernador (Enrique Alfaro) y al alcalde de Zapopan (Juan José Frangie). Ellos son culpables por ineptos”, señaló Itzi Solano, directora de Vinculación Ciudadana de la Confederación de Derechos Humanos, organismo que convocó a un plantón y a hacer pintas frente a la presidencia municipal.

A Luz Raquel, madre de un niño con autismo, le arrojaron alcohol y le prendieron fuego el pasado 16 de julio en un parque del municipio de Zapopan. Después de tres días de agonía falleció y ayer fue sepultada. Tras su sepelio se llevó a cabo una manifestación en esa ciudad. En la protesta silenciosa participaron madres de hijos diagnosticados con autismo, mujeres, activistas y decenas de ciudadanos indignados por el homicidio. Hicieron pintas con gis en la banqueta, encendieron veladoras, repartieron folletos y mostraron letreros, mientras un numeroso grupo de policías resguardaba la sede del ayuntamiento.

“Queremos la destitución de las autoridades, de quienes hayan sido responsables del expediente de Luz Raquel, porque ella pidió ayuda y se la negaron”, expresó Itzi Solano. Los hermanos Mirko y Máximo Álvarez, este último paciente de trastorno de espectro autista, manifestaron: “Los que nacemos así casi no tenemos futuro, y sin su madre a este niño (el hijo de Padilla) no sé lo que le espera”.

Las protestas llegaron a la comisaría de Zapopan, donde al mediodía y la tarde del jueves manifestantes repudiaron la falta de protección para la integrante de la organización Yo Cuido México.

En mayo pasado la víctima presentó una denuncia por agresiones de su vecino, Sergio “N”, quien le arrojó cloro industrial, le causó quemaduras e incluso pintó letreros con amenazas de muerte, molesto por las reacciones del hijo de Padilla Gutiérrez, quien en crisis gritaba y golpeaba paredes. Sólo después de que murió la joven madre las autoridades detuvieron al agresor el pasado miércoles. Según las investigaciones, el individuo no participó en el ataque con alcohol.

Tras presentarse voluntariamente ante la policía de Zapopan, Sergio “N” fue enviado a declarar a la Fiscalía del Estado, donde quedó detenido, informó la institución en redes sociales.

Añadió que “se cumplimentó la orden de aprehensión por lesiones, amenazas y delitos contra la dignidad de las personas”. Manifestación en la CDMX La agrupación Yo Cuido México también se manifestó frente a la representación del gobierno de Jalisco en la Ciudad de México para exigir justicia y castigo para los asesinos de su colega y criticaron las omisiones del gobierno.

Aseguraron que el homicidio de la madre cuidadora pudo haberse evitado si la fiscalía jalisciense hubiera atendido sus peticiones de auxilio, pero fue “ignorada”. Itzel Hermida Carrillo, integrante de la agrupación, dijo que demandan “justicia para nuestra compañera Luz Raquel y su hijo Bruno, de 11 años, quien quedó huérfano a raíz de este brutal asesinato”.

Agregó que ante la situación de las personas cuidadoras, existe una “sociedad indolente e indiferente” y lamentó “la impunidad que reina en nuestro país”. “Como hermanas de lucha nos sentimos indignadas por su asesinato. Ella había denunciado en repetidas ocasiones y había acudido a las autoridades; sin embargo, no se le escuchó.

Se dijo que se trataba de pleitos entre vecinos y que no ameritaban que ella fuera puesta bajo protección”, acusó Carrillo. La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y su similar de Jalisco exhortaron a las autoridades de procuración de justicia actuar con diligencia en la investigación de este caso.

Emir Olivares