En el documento aprobado por los legisladores locales establecen una propuesta de gasto por 949 millones de pesos (MDP) para este año y además prevén ingresos propios por 145 millones 500 mil pesos; uno de esos rubros, según las proyecciones de los legisladores, es por la venta del edificio ubicado en la Avenida Juárez número 237, casi esquina con la Calle Corona, por lo que consideran que podrían ingresar a las arcas del Congreso 60 MDP.
Sin embargo, el Legislativo invirtió 50 millones de pesos sólo para comprar el inmueble y ya ha invertido más de 50 MDP en equiparlo, remodelarlo y darle mantenimiento. De hecho, diputados de la Legislatura anterior denunciaron que el edificio estaba en muy malas condiciones y el entonces legislador Héctor Álvarez presentó una denuncia penal por la compra “irregular” de aire acondicionado que tuvo un valor por 8.4 MDP.
Cuestionado al respecto, el presidente del Poder Legislativo, Miguel Castro Reynoso, refirió que “un error no soluciona otro: si hubo un asunto negativo no tenemos por qué mantenerlo”.
Señaló que si alguien hizo un mal negocio no fue la actual Legislatura: “Las instituciones y las decisiones permanecen, pero si alguien hizo un mal negocio en su momento, no fuimos nosotros; lo que buscamos es resolver un problema”.
Justificó la venta del edificio porque en las próximas semanas se concretará el recorte de alrededor de 200 empleados del Legislativo y el inmueble alberga entre 250 y 300 trabajadores.
Para Castro, más que una venta se podría concretar un convenio con el Instituto de Pensiones, para saldar la deuda que tiene el Congreso, y se podría lograr un acuerdo para que, de ser necesario, el Legislativo se quede con uno o varios pisos. Señaló que la venta no se debería concretar con particulares, “porque eso se presta a manejos que pueden no ser claros”.
De acuerdo con el Presupuesto 2013, el Congreso espera ingresos por un millón 417 mil 907 pesos en el año por concepto de rentas, es decir, alquileres mensuales por 118 mil pesos a una institución bancaria durante los 12 meses del año, sin prever que dejarían de percibir ese dinero en el momento en que vendan el edificio Juárez.