GUADALAJARA, JALISCO (27/JUL/2013).- “Todavía no podemos decir si es milagro, o no es milagro”, dijo Ramiro Valdés, vicario del Arzobispado de Guadalajara, quien estará a cargo del seguimiento de análisis de la “hostia sangrante”.

El fenómeno causó revuelo en la comunidad católica, cuando el miércoles el párroco José Dolores Castellanos Gudiño, sacerdote del templo María Madre de la Iglesia, de la colonia Jardines de la Paz, anunció haber sido testigo de un “milagro eucarístico”, luego de que una voz le instruyera dar un mensaje a los feligreses.

Ramiro Valdés detalló que se está a la espera de los resultados, después de que por instrucciones del cardenal de Guadalajara, Francisco Robles Ortega, se retirara del culto público la hostia que, sin intervención humana, supuestamente comenzó a manifestar un cambio de color similar al de la sangre.

Agregó que actualmente la hostia, que denominan como consagrada, está guardada en el sagrario “donde estaba”, pero no se puede fijar un plazo para dar a conocer los resultados totales tras los estudios que procederán.

“Esto que hemos escuchado, de un milagro eucarístico (de la ‘hostia sangrante’) se está analizando, porque la Iglesia es prudente, la Iglesia en estos casos es escrupulosa, es cautelosa y hay que estudiar muy bien este hecho”, agregó al respecto el obispo auxiliar, Leopoldo González González.