Aprovechándose de la oscuridad de la noche y la poca fuerza de su víctima, los sujetos comenzaron a ultrajarla y al mismo tiempo a golpearla, con un bote de cemento que se encontraba en el lugar. El hecho fue escuchado por una vecina, quien rápidamente al observar tal escena informó a policías tapatíos quienes en cuestión de minutos se hicieron presentes; no obstante, los agresores ya habían huido.
Versiones de testigos informaron a los oficiales que los atacantes huyeron rumbo a las vías del tren por lo que de inmediato se inició con la búsqueda de los tipos. Minutos después, en la vertiente de Inglaterra y la avenida Enrique Díaz de León, lograron arrestar a un hombre mismo que coincidía con las características proporcionadas por los vecinos.
Se trata de quien se identificó como Arturo González Hernández, de 23 años de edad, originario de Apatzingán, Michoacán. El presunto homicida dijo que tenía siete meses viviendo en Guadalajara, dormía en la calle y se mantenía de asaltar a personas y robos, en tanto que de su cómplice no dio ningún dato que ayudara dar con su captura.
El cuerpo de la infortunada quedó sobre la cinta asfáltica. Su cabeza estaba destrozada; asimismo, se informó que los atacantes le introdujeron un pedazo de madera en sus genitales. Sus restos fueron llevados hasta la morgue de la calle Belén donde se espera que en las próximas horas sea identificada por algún familiar.
Personal del Ministerio Público, quien también se hizo presente al lugar de los hechos, comenzará con las averiguaciones en torno al hecho, por lo pronto el asesino y violador fue puesto a disposición de la autoridad pertinente.