No obstante, un tigre valiente tomó las medidas preventivas necesarias para salvar a su amo.
Eduardo Serio, jefe de la Fundación Black Jaguar-White Tiger (BJWT), que proclama la "revolución de amor" hacia los depredadores abandonados, trata a sus protegidos como si fueran gatos. Sin embargo, ni el afecto ni la comida abundante pueden reprimir del todo los instintos felinos.
Así, un leopardo intentó atacar a Eduardo por la espalda, pero el tigre, fiel a su dueño, cortó de raíz el posible incidente.
El concepto de un recinto interactivo, donde los animales salvajes conviven desde cachorros y los visitantes pueden tocarlos, es tanto popular como polémico.
De vez en cuando se denuncia maltrato a los animales e incumplimiento de las leyes sobre el acceso a recintos que cuentan con especies salvajes. El proyecto privado BJWT no es una excepción. En todo caso, es evidente la confianza que le tienen a Eduardo los cachorros de león y otras especies.