“La familia se encontraba en su casa cuando el comando se estacionó frente a su domicilio y estuvieron tocando el timbre de su puerta y al no tener respuesta, se retiraron. Sin embargo, todavía en la noche y hoy por la mañana se han visto hombres armados merodeando por el domicilio de la familia Sánchez Viesca”, denunció la Coalición Regional contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe (CATWLAC, por sus siglas en inglés).
La organización pidió a las autoridades garantizar la protección, la vida y la seguridad de la familia, que fue acosada desde el mes pasado cuando se especuló a través de redes sociales que “Fanny” –como llamaban de cariño a la adolescente desaparecida—era acompañante de Heriberto Lazcano, El Lazca. Información que desmintió la PGR.
Unos albañiles que laboraban en la casa vecina a la de la familia informaron sobre los rondines de los hombres armados. La familia no se percató del asunto.
“La familia, al enterarse, llamó a los contactos establecidos con las autoridades que llevan su caso y le dijeron que no hay órdenes para mandar elementos a su domicilio y que ninguna autoridad usa camionetas blancas”, informó la coalición mediante un comunicado.
Ante esta situación, la CATWLAC exige a las autoridades estatales y federales que se garantice la vida, seguridad e integridad de esta familia, frente a las intimidaciones que aparentemente provienen del crimen organizado. “Fanny” fue “levantada” por unos presuntos zetas el 5 de noviembre de 2004 en Torreón, Coahuila cuando contaba con sólo 16 años.
Durante las investigaciones el gobierno federal manifestó a la familia que un “alto líder” del crimen organizado la tenía en una ciudad de Estados Unidos. Se hicieron las investigaciones pertinentes y se comprobó que no era Fanny.
Recientemente se trató de imputar que Fanny era la pareja sentimental del Lazca, recientemente abatido por la Marina, lo que obligó a la mamá de Fanny a viajar a la Ciudad de México y comparecer ante los medios para desmentir esa información.
Proceso