Protección Civil del Municipio y Obras Públicas del estado inspeccionaron las estructuras y determinaron que fueron objeto de un daño severo que podría provocar su colapso si se mantienen en uso, por lo que fueron cerradas a la circulación.
Los especialistas evaluarán la magnitud de la afectación, aunque parece que los dos puentes deberán ser derruidos.
Algunos pedazos, con un peso de hasta un cuarto de tonelada, fueron cortados de las vigas que cruzan transversalmente el puente, de unos 20 metros de largo por dos de alto. Los huecos provocaron que el paso se debilitara y que el pavimento y las banquetas se cuartearan, provocando una evidente deformación de la joroba.
Los ladrones también se llevaron unos tirantes transversales que soportaban el esqueleto de la construcción.
El alcalde se dijo desconcertado por la manera en que fue efectuado el robo, pues el material en conjunto es pesado y para sustraerlo fue necesario hacer maniobras complicadas de las que no se percató, al parecer, ninguna autoridad.
El edil consideró urgente efectuar las reparaciones, pues los dos puentes conectan la zona metropolitana de Monterrey con los parques industriales de Apodaca, de los que entran y salen diariamente decenas de unidades de carga.
No hay antecedentes de un robo de este tipo en la zona metropolitana de Nuevo León.