La discreción es máxima en la investigación que la Policía mexicana ha abierto para esclarecer la múltiple violación a las turistas españolas en Acapulco. Un caso en el que colaboran agentes de la Policía Nacional española destinados en la embajada de México.
Los investigadores creen que están muy cerca de detener a los cinco encapuchados que asaltaron el chalé donde los españoles pasaban un fin de semana de vacaciones. Los asaltantes son un grupo de jóvenes, de no más de 25 años, que son, viven, trabajan y delinquen en la zona, en el barrio de Barravieja. De hecho, ya hay seis detenidos, trabajadores de la zona. Dos de ellos han sido reconocidos por las víctimas, uno de ellos por su voz y otro por su cara.
Se cree que alguien debió dar el soplo a los agresores de que un amplio grupo de turistas se había instalado en el bungalow que un empresario mexicano había alquilado por 150 euros diarios. Los trece turistas, doce españoles (seis mujeres y seis hombres) y una mexicana (casada con uno de los chicos), llegaron a la casa el viernes 1 de febrero para pasar el puente, ya que el siguiente lunes era festivo.
Entraron por la parte de atrás
Los asaltantes entraron por la zona trasera de la casa, la que da a la playa, con una verja más sencilla de saltar. Lo hicieron sobre las tres de la mañana. Al parecer, se encontraron primero con tres chicos que estaban en el jardín. Los encañonaron y los amordazaron. Luego entraron en la casa y lo primero que hicieron fue juntar a todos los inquilinos de la casa: los trece turistas.
A los hombres les ataron, según explicó ya la fiscal general del estado de Guerrero, Martha Elva Garzón. A uno de ellos le partieron el brazo. Y mientras amenazaban al resto, cogieron a las chicas y se las llevaron a las habitaciones. Allí, según las mismas fuentes, las violaron por turnos mientras las encañonaban. La pesadilla duró unas tres horas. Los agresores no llevaban pasamontañas, sino pañuelos tapándoles la cara. Y al parecer iban bebidos.
Las turistas no son realmente turistas. Los 12 españoles llevan ya varios años trabajando en Mexico para firmas españolas y mexicanas. Algunos de ellos son parejas. Las mismas fuentes destacan que las chicas están "extremadamente mal" anínicamente.