El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha firmado este viernes un decreto que ordena la preservación de la memoria histórica y la celebración del 100.º aniversario del nacimiento de Yuri Knórozov, el reconocido lingüista ruso que descifró la antigua escritura maya.
"Señalando la destacada contribución del científico, etnógrafo y mayista ruso Yuri Valentinovich Knórozov en el desarrollo de la ciencia nacional y mundial y en relación con el centenario de su nacimiento, ordeno al Gobierno de la Federación de Rusia, en un plazo de tres meses, [...] asegurar la elaboración y la aprobación de un plan de eventos principales para perpetuar la memoria de Y. V. Knórozov, así como preparar y llevar a cabo la celebración de los 100 años desde su nacimiento", reza el documento. Además, el decreto indica que el Gobierno ruso debe formar un comité organizador especializado y aprobar a sus miembros.
Por otra parte, se recomienda a las autoridades federales y regionales, así como a organizaciones científicas y educativas que estén interesadas en el proyecto, a participar en la preparación de eventos destinados a la conmemoración de Knórozov. ¿Quién fue Yuri Knórozov? Yuri Knórozov desempeñó un papel principal en descifrar la antigua escritura maya.
Nacido el 19 de noviembre de 1922 en el pueblo de Yuzhni (en la República Socialista Soviética Ucraniana), estudió historia en la Universidad de Járkov. Sin embargo, tuvo que interrumpir sus estudios debido al inicio de la Gran Guerra Patria y los continuó en 1943 en la Universidad Estatal de Moscú. Allí leyó un artículo del investigador alemán Paul Schellhas, que opinaba que descifrar los textos maya era imposible.
Junto con Knórozov, especialistas estadounidenses trataron de descifrar la escritura jeroglífica maya, pero su visión era completamente diferente a la del especialista soviético. Al analizar tres textos antiguos, Knórozov determinó que contenían 355 signos y ya en 1952 logró determinar el modo de leer algunos de ellos. Su obra más conocida, 'La escritura de los indígenas mayas', fue publicada en 1963 y dio a la comunidad internacional la oportunidad de conocer los textos de esta antigua civilización.
Knórozov logró su hazaña científica pese a que nunca visitó el legado maya. "Soy un científico de despacho.
Para trabajar con los textos no es necesario correr sobre las pirámides", dijo.
Solo en 1989 finalmente visitó Guatemala por invitación de su entonces presidente, Vinicio Cerezo. En 1994, Knórozov recibió la Orden del Águila Azteca por su trabajo. El lingüista falleció en 1999 en San Petersburgo. En el 2012, en la ciudad mexicana de Cancún fue erigido un monumento en su honor, y seis años más tarde otro en Mérida.