Aquí los detalles. La pandemia se mantiene vigente en nuestro país, y ahora se informó que ya se confirmaron los primeros casos de las variantes BQ.1 y BQ.1.1, procedentes de la Ómicron (B.1.1.529), la cual, a su vez, se deriva de la Covid-19 o SARS-CoV-2.

Dicha variante también es conocida como ‘Perro del infierno’. De acuerdo con información del Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE) los estados en los que ha sido identificada son Estado de México, Nuevo León, Campeche, Tabasco y Yucatán.

Cabe resaltar que el InDRE aseguró que no es una variante predominante, sin embargo, uno de los últimos informes del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) indican que “las mutaciones le han conferido a la subvariante BQ.1 una ventaja en la evasión del sistema inmune, así como una mayor propagación mundial”. Aunque actualmente no existen datos epidemiológicos que indiquen una gravedad mayor de la enfermedad.

Pues las vacunas siguen protegiendo contra la Covid-19, así que importante que la población con las medidas sanitarias de prevención, a pesar de que desde hace unas semanas ya no es obligatorio el uso de cubrebocas.

¿Por qué se le dice ‘Perro del infierno’? En redes sociales muchos comenzaron a llamarlo como ‘Perro del infierno’, en inglés conocid como Hellhound), y hace referencia al perro de Hades, dios de los muertos y del inframundo, también conocido como ‘Cancerbero’ o ‘Cerbero’.