Tras darse a conocer la captura de Ismael “El Mayo” Zambada y de Joaquín Guzmán López en El Paso, Texas, comenzaron a surgir las dudas de por qué ambos narcotraficantes fueron arrestados en territorio estadounidense.

Una de las versiones apunta a que Zambada García y el hijo del Chapo se habrían entregado a la DEA, y es por ello que cruzaron la frontera por decisión propia.

Sin embargo, para algunos esto resulta difícil de creer considerando que el Mayo nunca pisó una cárcel, y permaneció oculto durante décadas en la sierra de Sinaloa sin que las autoridades de México y EE.UU. pudieran acercársele.

Más tarde surgió otra versión que habla de una presunta traición hacia el líder del Cártel de Sinaloa, pues él no sabía que viajaría en un jet privado a Texas, y mucho menos que sería detenido. Dicha información fue publicada por el diario The Wall Street Journal, que citó como fuentes a funcionarios estadounidenses de Investigaciones de Seguridad Nacional.

El diario asegura que “El Mayo” pensó que iba a supervisar una de las pistas aéreas clandestinas del Cártel de Sinaloa, cuando autoridades estadounidenses lo detuvieron a él y Joaquín Guzmán López. Además, se informó que la operación fue preparada durante meses y contó con diversas agencias federales estadounidenses y agentes armados con fusiles.

Por su parte, el diario The New York Times publicó que, al parecer, fue el propio Joaquín Guzmán López quien engañó a Zambada García para convencerlo de subir a la aeronave.

Lo único cierto es que el discreto aeropuerto privado de Santa Teresa, Nuevo México, ubicado en el Condado de Dona Ana, muy cercano a El Paso, fue el escenario de la captura de uno de los hombres que evadió a la justicia mexicana y estadounidense durante décadas.