Las razones que pueden llevar al recuento de votos incluyen una diferencia igual o menor al 1% entre el ganador y el segundo lugar, errores en las actas o que los votos nulos sean mayores a la diferencia entre el ganador y el segundo lugar.
El consejero del Instituto Federal Electoral (IFE) Alfredo Figueroa dijo en una rueda de prensa que entre 45.000 y 50.000 paquetes electorales "serían eventualmente abiertos por los consejos distritales". "Estamos ofreciendo estimaciones (...) Estamos hablando en términos generales de un tercio de la elección presidencial", afirmó Figueroa.
De momento, en 19 de los 300 distritos electorales repartidos por todo el país el recuento será total porque la diferencia entre el ganador de la elección presidencial y quien quedó en segundo lugar es igual o menor al 1%, lo que implica cerca de 10.000 mesas de votación. Además, en "en otros distritos probablemente habrá un recuento parcial".
El cálculo del IFE no está vinculado con la amenaza de impugnar las elecciones hecha por la izquierda mexicana, que no ha reconocido su derrota en las urnas. Según los datos preliminares, el vencedor de la elección presidencial fue Enrique Peña Nieto, candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
La atribución de recontar los votos depende de los consejos electorales de cada distrito, por lo que el IFE solo proporcionó cálculos de la cantidad de votos que cree puedan ser sometidos a un recuento.
Esta es la primera vez que, a raíz de la última reforma electoral, el recuento de votos puede hacerse en la elección presidencial. En los comicios legislativos de 2009, los primeros a raíz de esa reforma, se recontaron los sufragios de más de 40.000 mesas de votación.