Un grupo de científicos alemanes logró establecer que el virus, que ya mató a millones de personas en el mundo, fue artificialmente creado en el laboratorio. Como parte de la investigación, los científicos pudieron establecer que el virus no podía formarse por sí solo, y sus mutaciones actuales indican que la propagación de la infección puede controlarse artificialmente.
Según los científicos, se tomó como base un virus natural que, al manipularlo, adquirió mayor resistencia a los factores negativos externos y también resultó ser más mortal. La característica clave del virus es su propagación rápida y sutil, lo que llevó al hecho de que en cuestión de semanas millones de personas en todo el mundo se infectaron con él.
Es muy notable que hasta la fecha, la infección no haya sido derrotada, en particular, se detectaron más de 8600 casos de infección por coronavirus COVID-19 en Rusia durante el último día, mientras que la tasa de mortalidad fue de 88 personas.
Hasta la fecha, existen varias cepas de infección, la detección de cada una de las cuales es cada vez más difícil.