Ciencia y Tecnología
Elegir entre dos cosas buenas puede ser complicado, más si se trata de dos pulsiones básicas: una suculenta cena (hay que alimentarse para sobrevivir) o una sesión amorosa con una atractiva pareja (hay que reproducirse para continuar la especie), pero ellos lo tienen tan claro que dejan sin razón de ser la creencia popular de que «se les conquista por el estómago».
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Después de muchos rumores y filtraciones, Google presenta su nuevo smartphone, el Nexus 6. A diferencia de los detalles que se habían conocido, el terminal tendrá una pantalla de 6 pulgadas, entrando de lleno en el sector de las «phablets».
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La onicofagia o el hecho de morderse las uñas, (Del griego öνυξ, —υχος, uña, y —fagia) es una manía común, y tan difícil de erradicar que, en muchos casos, se mantiene de adulto. Aunque según los psicólogos, la mayoría de los niños que presentan este hábito suelen dejar de morderse las uñas con el tiempo, hacia el final de la adolescencia hay alrededor de un 25% que aún sigue haciéndolo.
Nuestras pulsiones sexuales no siempre son controlables. (iStock)
El amor y el sexo siguen mecanismos mucho menos refinados de lo que nos gustaría, lo que explica por qué todo el mundo, en algún momento de su vida, se ha enamorado de una persona que se comportaba con él como un auténtico cretino, ha mirado con deseo (tratando de reprimir este) a alguien de una edad muy inferior a la suya y ha tenido pulsiones sexuales que se alejan por completo de lo que la mayoría de gente considera razonable.