Como parte de la pelea que sostiene con el presidente Donald Trump, el magnate sudafricano Elon Musk les planteó a sus seguidores en redes sociales la posibilidad de crear a un nuevo partido político.
Luego de 130 días de fungir como empleado especial del gobierno al desempeñarse como responsable del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), el hombre más rico del planeta terminó disgustado con el jefe de la nación.
De manera sorpresiva, el visionario empresario que le aportó cerca de $250 millones de dólares a la campaña del republicano de 78 años se volcó en su contra e incluso le recordó que sin su apoyo no se hubiera concretado su victoria frente a la demócrata Kamala Harris.
“Sin mí, Trump habría perdido las elecciones, los demócratas controlarían la Cámara de Representantes y los republicanos tendrían 51-49 en el Senado. ¡Qué ingratitud!”, señaló en la plataforma X, anteriormente conocida como Twitter.
Uno de los grandes puntos de choque con el presidente derivó del proyecto de ley fiscal y presupuestal que pretende imponer y al que Musk definió como una abominación repugnante. “Este proyecto de ley del Congreso, enorme, escandaloso y repleto de gastos superfluos, es una abominación repugnante.
Eliminen la montaña de basura repugnante del proyecto de ley”, enfatizó. Ante la amenaza de Donald Trump de cancelar los contratos del gobierno firmados con sus empresas en represalia a los comentarios despectivos, el dueño de empresas como Tesla y SpaceX abrió la posibilidad de brindar los recursos necesarios para fundar un partido político que compita a la altura de los dos que, durante décadas, se han alternado el control de la Casa Blanca.
“El pueblo ha hablado. ¡Se necesita un nuevo partido político en Estados Unidos que represente al 80% del centro! Y exactamente el 80% de la gente está de acuerdo.
Este es el destino”, escribió Musk, agregando el presunto resultado de una encuesta a través de la cual les pidió a sus seguidores en la plataforma X votar para conocer si estaban interesados en ser parte de una nueva organización que los representará de una manera distinta al frente del gobierno.
Y para dejar en claro lo serio de su propuesta política, el sudafricano incluso hasta un nombre propone: “El Partido de América”.