En su declaración del 3 de octubre, integrada en la averiguación previa 527/2012/H.I., relató que había participado en el crimen de Imelda Virgen, al instigar a su hermano y a El Güero, para cometer el asesinato por el cual Gilberto Vázquez Cortés, ex esposo de la profesora, les pagaría 50 mil pesos y además les daría un automóvil Chevrolet Matiz azul.
El 29 de septiembre de 2012, Imelda Virgen fue asesinada. Su ex marido, Gilberto Vázquez confesó en su primera declaración que él había contratado a dos hombres –David Ceja y Sergio Sánchez– para que la mataran.
Ceja y Sánchez declararon el 3 de octubre que Gilberto Vázquez, al que conocían como El Psico, les había propuesto tal trabajo: el de asesinar a su mujer.
Ese mismo día David, Sergio, Juviana y un menor de edad –que ayudaría al trío a vender el vehículo– fueron detenidos a bordo del Matiz.
La defensa de Joceline Juviana reclamó que ella no había participado en el suceso. Salió libre bajo fianza por el “delito de encubrimiento”.
La parte defensora de la familia Virgen Rodríguez apeló y pidió que se le enjuiciara por el delito de parricido al igual que a David y Sergio.
“La primera Sala del Supremo Tribunal de Justicia resolvió diferente y dijo que Juviana sí participó”, dice Alejandra Cartagena, abogada de la familia de Imelda.
El jueves pasado, Joceline Juviana fue a firmar como lo hacía cada mes desde octubre al Juzgado Décimo de lo Penal en Puente Grande. El terminar de plasmar su firma, el Ministerio Público ordenó a policías que la detuvieran a las puertas de los juzgados. Y desde entonces está presa.
El mismo jueves se llevaría a cabo una audiencia en la cual los tres implicados –David, Sergio y Juviana– ampliarían su declaración. También habría un careo entre el trío y Gilberto Vázquez Cortés.
La estrategia de la defensa de los acusados para alargar el juicio ha sido la misma en las dos últimas audiencias: uno de los abogados de alguno de ellos nunca llega, con lo cual, se pospone el encuentro.
Para Cartagena, la detención de la mujer señalada como participante en el asesinato de Imelda, es una buena señal.
“La verdad es que fue un buen trabajo el del Ministerio Público, como pocos lo hacen, espera a que ella firme y al final le informa que su situación ha cambiado, por lo que regresa al mismo delito del que estaba acusada en un principio y vuelve a estar presa”, detalla.
El asesinato de Imelda Virgen es considerado por organismos no gubernamentales como el primer feminicidio desde que el delito quedó tipificado en el Código Penal del Estado de Jalisco en septiembre de 2012.