“En el CAPECE hay presuntos actos de corrupción, motivados por eventos que ya de tiempo se han señalado, en varias formas y es importante que la gente sepa que el ingeniero Salvador Uribe Avín, director del organismo, está actuando, está abusando del poder, está utilizando algunas empresas para hacerse de recursos y eso es lo que estamos denunciando. Él está violando totalmente la Ley de Obra Pública, porque ésta prevé dar preferencia a las empresas que mejor hacen los trabajos y a las que tengan más antigüedad, lo está ignorando”, explicó Leobardo Vargas Ceballos, representante de Constructora Varce.
El empresario David Vega Ochoa destacó: “Somos empresas que ya tenemos un historial dentro del CAPECE, hemos dejado evidencia de nuestra buena calidad en la construcción, y me he tomado la libertad de traer las actas de entrega y finiquito de las obras que durante la administración pude llevar a cabo, en ninguna de ellas se me hace señalamiento de mala calidad, y no encuentro el argumento bajo el cual se nos señala como empresas mal hechas para descalificar nuestras denuncias”.
—A la gente le preocupa lo del diezmo o el quinto, 10 a 20 por ciento del monto de la obra, que se debe pagar para poder trabajar, ¿eso se da en CAPECE?
—Efectivamente, se da de tal forma, que de alguna forma favoreciendo a algunos y dañando a otros, en el caso particular que nos concierne a nosotros, que hemos sido dañados, porque no nos hemos prestado a eso, e inclusive hemos sido indiscriminadamente borrados del padrón de constructores.
Esto es evidente “porque 50 por ciento de la obra del CAPECE es adjudicada o es en la modalidad de concurso por invitación, que de alguna forma está simulado, siendo una asignación directa, ya pactada [...] la obra de licitación pública en comparación con los costos de la obra en la modalidad de concurso por invitación o de asignación directa, tiene una diferencia de importes abismal, eso demuestra que se deben inflar costos para pagar la cuota y hacer las obras”.
Juan de Dios de la Torre, otro constructor, añadió: “La mentira es una forma de corrupción, no nada más de él, sino de algunos políticos, que se han dedicado a gastar [...] se habla de un capital fuerte, de 800 a mil millones de pesos anuales [del CAPECE]; el porcentaje que se nos pide a veces, módico, va de 3 a 5 por ciento del monto”. Rodolfo Ramos, empresario del ramo y ex director de Infraestructura Rural en el estado, respaldó: “El daño económico a la sociedad es enorme; yo creo que este problema de la corrupción, que no tiene partido y hay que decirlo con toda claridad, tampoco en eso somos originales en el estado de Jalisco, pero estamos hartos, esto no puede seguir”.
Fuente: Milenio